sandra palma

La inspiración llega cuando hay algo que me emociona, puede ser una imagen, la música o una frase con la que conecto inmediatamente. Entre las imágenes que me atrapan hay tres en especial que siempre encuentran mi mirada para seguir observando detenidamente: los árboles, las cortezas con tantos colores y texturas, con sus cicatrices que relatan su historia de vida, las ramas de formas caprichosas y las raíces curveadas aferrándose a su tierra. Las aves, espíritus libres que con sus plumas tan finas y exquisitas pueden ser capaces de alcanzar grandes alturas; me maravilla la arquitectura de sus nidos y los huevos que depositan en ellos: confían su tesoro más preciado a un puñado de ramitas y barro. Y los listones de colores; en mi obra representan el hilo conductor de la vida, a veces flotando, otras tenso, desgastado, con nudos, de color brillante y también con sombras, roto abruptamente y después remendado, deshilachado o curveándose glorioso con en el viento.